Problemas de humedad en Terrazas :

Cuando tenemos la posibilidad de ver los edificios desde arriba, podemos observar que existen diferentes tipos de terrazas, cuyas características  estética, transitabilidad, protección perimetral, etc. varían de acuerdo al uso al que están destinadas.

Para facilitar el análisis de este informe, clasificaremos a las terrazas en
cuatro tipologías bien definidas, las que a la hora de encarar un tratamiento de impermeabilización, presentan diagnósticos similares y comparten las mismas exigencias de resolución, que deben ser evaluadas de acuerdo al valor que el consorcio le dé a cada una de ellas.


TIPOS DE TERRAZAS Y SUS CARACTERISTICAS GENERALES

TERRAZA - TENDEDERO:
De uso común. Acceso por escalera principal. Constituye el techo de las
unidades del último piso. Perimetradas por parapetos, medianeras o a veces por barandas de herrería. De tamaños muy variados. Pueden tener chimeneas o tubos de ventilación. Sus pisos suelen ser de baldosas de cerámica o de carpeta alisada con algún revestimiento impermeable. Se transita frecuentemente para tender ropa.

BALCON - TERRAZA:
De uso particular. Acceso por interior de las unidades. Forman parte del techo de las mismas, del anteúltimo o antapenúltimo piso. Es común que haya más de uno en forma escalonada. Tienen barandas de hererría al frente y parapetos o medianeras a los costados. Por lo general no son de gran tamaño. Sus pisos  casi siempre son de cerámica esmaltada o mosaicos. Son utilizados como lugar de estar. Se les apoyan sillones, macetas y algunas veces parrillas.

PATIO - TERRAZA:
De uso particular o a veces común. Casi siempre se accede por las unidades del primer piso o planta baja. Por lo general constituyen el techo de cocheras, locales comerciales o de otras unidades. Suelen tener grandes canteros. En general son de gran tamaño. Sus pisos acostumbran ser de baldosas de cerámica o mosaicos, también pueden tener un prolijo techado de caucho acrílico. Son utilizados como lugar de estar. Se les apoyan mesas de jardín, reposeras, etc.

TERRAZAS INACCESIBLES:
No se usan, salvo ocacionalmente por alguna eventualidad. Son de difícil
acceso, a veces por escaleras marineras. Suelen tener cargas bajas en su perímetro. Constituyen el techo de unidades del último piso, portería o sala  de ascensores.
Casi siempre tienen membrana flotante o techado asfáltico con velo de vidrio y terminación de aluminio. Son pisadas por plomeros, antenistas o personal de teléfonos y videocables para realizar tareas de reparaciones. Por lo general se encuentran bastante descuidadas.

CAUSAS PRINCIPALES DE LA MAYORIA DE LAS FILTRACIONES

Los diversos  factores que pueden ser motivo de filtraciones en una terraza, depende del tipo y características de cada caso en particular. Pero casi todos ellos tienen su origen en una causa común: los movimientos de dilatación y contracción que sufren las lozas de hormigón, que al estar expuestas a la intemperie, son generados por los constantes cambios climáticos. Esta expansión y contracción dimensional de la losa, provoca diversos traumatismos en contrapisos, aislaciones y solados apoyados en ella, causando rajaduras o grietas de todo tipo, que constituyen el principal motivo de presencia de humedad en cielorrasos.

Hay que tener en cuenta también que al aumentar la dimensión de la losa cuando ésta se dilata, se produce un desplazamiento lateral, que provoca rajaduras horizontales en frentines de aleros y balcones, medianeras y frentes, por las cuales puede penetrar el agua y hacer su camino hasta manifestarse en el ángulo del cielorraso con la pared. Esto ocurre en las losas de los últimos pisos, ya que siempre están expuestas a los rayos solares. Ante este fenómeno muchos se preguntan: ¿ Las terrazas se rajan por un defecto de construcción ? No es así. Hay que tener en cuenta que las lozas de hormigón se construyen con cemento, piedras y un armazón de hierros, que es el que soporta casi todo el peso y hace que el hormigón sea "armado".

Es ese hierro que las lozas tienen adentro, el que se estira cuando se calienta y vuelve a su tamaño normal cuando se enfría, provocando en la rigidez de la masa cementicia  fisuras que se abren y se cierran según varíe la temperatura. Aunque existen rajaduras, en casos menos frecuentes, que son provocadas por problemas estructurales ( fundaciones inadecuadas o movimientos de suelo ), que repercuten en la estructura de todo el edificio. Estos casos se reconocen por lo general, por grandes rajaduras verticales que presentan las paredes de  frentes y medianeras

CASOS MAS COMUNES EN CADA TIPO DE TERRAZA

Quien está experimentado en diagnosticar problenas de humedad, sabe que la mancha que aparece en el techo, no siempre coincide con la zona por donde está penetrando el agua en la superficie de la terraza. Esto quiere decir que la humedad, al atravesar las diferentes capas que forman el techo, puede desplazarse hasta encontrar las fisuras de la losa, que le dejan el camino libre para manifestarse en el cielorraso.

Pero sabe también, que en la mayoría de los casos, la entrada de agua está a la vista. Sólo es cuestión de saber mirar, conociendo los puntos débiles de cada tipo de terraza.

Por ejemplo, en las terrazas - tendedero con piso de baldosas, es muy común encontrar aberturas en las juntas de dilatación y rajaduras por el medio de  los paños, por donde penetra el agua, hasta ser detenida por la aislación hidráulica (membrana asfáltica). Si la aislación hidráulica no se encuentra  en buenas condiciones, filtrará hasta la losa y a través de las fisuras de la  losa al cielorraso.

Si el piso de la terraza - tendedero ya tiene un revestimiento acrílico transitable, pueden detectarse las rajaduras fácilmente, ya que éste hace de testigo marcando las grietas que más trabajan en forma más pronunciada.

Para completar el diagnóstico, habría que revisar el estado de los desagües como así también el sellado del marco de la puerta de acceso a la terraza,  el que muchas veces se encuentra abierto, transformándose en un problema "fantasma" (ya que está, pero no lo ven) para los inexpertos que subestiman  su importancia.

En el caso de un balcón - terraza, además del factor riesgo que representan las rajaduras y juntas de dilatación defectuosas, es frecuente encontrar los zócalos de los marcos de las puertas - balcón en avanzados estados de  oxidación. Este óxido puede ser causado por agua que penetró por falta de  hermetismo en el sellado del marco, o también por humedad contenida en el  contrapiso, por una membrana estanca que no desagota correctamente dentro del  desague, picando por debajo el zócalo. En este último caso, es probable que tenga humedad ascendente en las paredes que lindan con el balcón, y hasta es posible que la humedad se extienda por el contrapiso hacia el interior, arruinando parquets, alfombras, etc. Cuando se levanta una terraza o balcón, para colocar una membrana y volver a cubrir con contrapiso y baldosas, es un error muy común que el borde del embudo del desague, quede más alto que el nivel de la membrana, y ésta no desagote dentro de él. Lo que trae como consecuencia el embalsamiento de agua que mantiene al contrapiso constantemente mojado. Esto puede reconocerse por unas manchas salitrosas de color blanco, que se forman alrededor de las rajaduras, por efecto de la cal del contrapiso. Por eso, en una terraza donde se  hayan colocado una membrana y baldosas arriba, es conveniente inspeccionar los desagues, para cerciorarse de que la membrana aparezca dentro de él, para desagotar correctamente. De no ser así, cabe preguntarse a dónde va a parar el agua que esa membrana junta.

En los patios - terraza hay que poner especial atención cuando tienen canteros fijos, ya que éstos,por desagotes incorrectos, daños que causan las raices o simplemente por falta de aislación, pueden ser causa de filtraciones muy difíciles de determinar.
Los patios que generalmente dan sobre las cocheras, suelen ser de grandes dimensiones, lo que hace que los movimientos de dilataciónsean mayores, exigiendo al máximo a las juntas y provocando grandes rajaduras, que producen goteras con un alto contenido de cal, muy perjudicial para la pintura de los autos.

Los problemas de humedad en terrazas inaccesibles por lo general se presentan de dos formas: pueden tener un techado asfáltico plástico tramado con velo  de vidrio, donde fácilmente pueden detectarse las rajaduras o las zonas que presentan riesgos de humedad; o bien pueden tener una cubierta de membrana flotante. En este último caso, si existen filtraciones, es muy probable que la membrana esté dañada por un mal trato, tenga babetas despegadas por falta de imprimación, o puede ser una membrana de baja calidad, que no tenga el asfalto correctamente plastificado y se encuentre resquebrajada. Pero de nada serviría detectar la falla de la membrana, ya que dada su condición de flotante, el agua se gana por debajo de ella quedando atrapada, sin más salida que las rajaduras del piso, lo que nos obliga a levantar totalmente.


En todos los casos aqui descriptos, cualquiera sea la tipología de la terraza, hay que contemplar como un constante factor de riesgo las rajaduras horizontalesque corren a la altura de las losas, en frentes y medianeras.

Hasta aquí, hemos analizado los principales motivos de filtraciones y sus orígenes, en los diversos tipos de terrazas que puede tener un edificio. En las próximas ediciones, continuaremos este informe, estudiando las posibilidades de solución que puede aplicarse a cada tipología de terraza, evaluando materiales y sistemas de impermeabilización de acuerdo a su efectividad, transitabilidad, estética, etc. ZAPATERO A TUS ZAPATOS

En la búsqueda de soluciones a los problemas de filtraciones de una terraza, es muy común recibir todo tipo de recetas, que van desde la del arquitecto que propone levantar todo y hacer la terraza de nuevo, hasta  las que prometen resolvernos el problema por el precio de unos jornales.
Así es como encontramos gente que se dedica a hacer de todo un poco, o mano de obra desocupada de otros gremios, que improvisan soluciones adaptando sus verdaderos oficios.
Entonces viene el albañil y cuchara en mano nos aconseja picar, rellenar con cemento, cambiar algunas baldosas y "santo remedio". Luego aparece el pintor, que esgrimiendo su rodillo nos propone pintar toda la
terraza y "listo el pollo". Nos cruzamos con el plomero y haciendo alarde de su soplete, se ofrece a colocar membrana por todas partes.

Y nunca falta el portero habilidoso y servicial, que en la ferretería de la esquina compra un poco de "brea" y se la pasa a esa grieta que aparece en la terraza.
Lo único que falta es que nos encontremos con el paragüero y que tirándose un lance para agarrar la changa, nos proponga instalar un paraguas gigante que cubra toda la terraza.
¿ Se lo imaginan diciendo ?: "... para ahorrar unos pesos, podríamos aprovechar algún caño de antena que no se use,... eso sí, el portero no tiene que olvidarse de subir a la terraza a abrir el paraguas cada vez que esté por  llover".
Señores administradores y consorcistas, el rubro impermeabilización es casi  tan antiguo como la lluvia. Y como se puede constatar, hay profesionales y empresas que se dedican específicamente a ello, acumulando a través de los años, una experiencia valiosísima. No hacer uso de ella, significa "pan para hoy y hambre para mañana".

Si Ud. está vinculado al mantenimiento de un edificio, ya sea administrador, del consejo de administración o simplemente un damnificado, es posible que  se haya sentido identificado con algún caso de los planteados en esta nota, aunque muchos han quedado en el tintero.

Por eso, si existe un caso que no esté representado en este informe que quiera consultarnos, o tiene un problema de humedad de difícil solución, o que después de varios intentos no han dado en la tecla para resolverlo; escríbanos a  detallándonos su problema o sus dudas. Responderemos a su consulta publicando su caso, para que otros puedan beneficiarse con su experiencia.


Alejandro E. Mangiarotti